Estaba el orangután, meciéndose en una rama, y pasó la orangutana, comiéndose una banana... Pobre animalito no lo respetan ni en una canción.
( Foto original Mattias Klum)
Historias cotidianas de los muñequitos que auyentan el dolor.
Sitio certificado por |
double room rent affitto posti letto |
No hay comentarios:
Publicar un comentario